EL 7°
REGIMIENTO DE CABALLERÍA.
No se
porqué el amplio titular en primera plana del Diario Ultima Hora, del día
miércoles 28 de mayo del presente año, me hizo recordar la serie de películas
del oeste norteamericano, basadas en aquellas guerras contra indígenas, en las
que siempre resultaba victorioso el 7° Regimiento de Caballería. Quizás por el
número 7 de 70 que aparece en el mencionado titular que decía: SENAD ENVÍA 70
AGENTES A PEDRO JUAN PARA COMBATIR A SICARIOS. Por de pronto me parece
interesante retrotraer la historia. En la realidad, no en las películas, el 7°
Regimiento de Caballería, comandado por el Coronel George Custer, en la guerra
por la conquista del oeste, participó en dos batallas contra los indios sioux y
cheyennes. Una en 1668, en Wishita, cuando 700 soldados aniquilaron un
campamento indígena de niños, mujeres y ancianos. La segunda batalla fue en
Dakota, 6 años después, contra los guerreros sioux y cheyennes, que esta vez
pudieron vengar la matanza anterior y el regimiento terminó en un desastre
militar, con un desbande general y la pérdida de gran parte de sus efectivos.
Desde entonces fueron filmadas una cantidad de películas donde siempre
resultaba victorioso el Séptimo Regimiento de Caballería. Indudablemente era
para tapar y borrar aquel gran fracaso. Nos vendieron la imagen de imbatible de
una fuerza militar que en la práctica sufrió una vergonzosa derrota.
¿Acaso la
presencia de un ejército de 70 agentes de la SENAD en Pedro Juan Caballero no es también la
versión de una película que se nos quiere vender? Es doloroso lo que ocurre en la capital y otras
localidades del Amambay, referente al tema de
la seguridad. Una alarmante cifra
de muerte por semana motivó la presencia de los agentes antidrogas. Pero,
porqué se tenía que publicitar el operativo en primera plana de un diario. Es como decirle, muchachos desparezcan por
unos días porque nos vamos con todo. Claro que de cualquier manera ellos iban a
ser los primeros en saberlo, aunque se hubiera procedido dentro del mayor
sigilo por las infiltraciones que tienen. Además, porqué solamente se iba a
combatir a los sicarios, si al final estos son peones, son mandados de los
clanes de la mafia de la droga y el tráfico de armas. Ya se sabe de antemano
las bandas que operan en la zona que cuando entran en conflicto de intereses
son las que provocan las matanzas. Son las denominadas PCC (Primer Comando
Capital) y el Comando Vermelho, ambos del Brasil que extienden sus tentáculos
hasta nuestro país. Se sabe también quiénes son los elementos locales de uno y
otro bando. En cuánto a los sicarios también en gran parte se les conoce;
muchos de ellos son delincuentes que se esconden en las estancias pertenecientes
a capos mafiosos donde nadie entra y en
las que operan aviones que aterrizan a toda hora sin control alguno. En esta
zona la seguridad es un problema de soberanía. Es lamentable reconocer que una
gran parte del territorio nacional está controlado por la mafia y que la lucha
contra la misma requerirá de una estrategia especial y quizás de una capacidad
política diferente. En nuestro país también se emula la actuación del 7°
regimiento de caballería. Aquí también las fuerzas operativas arrasan
comunidades indígenas y asentamientos campesinos quemando los ranchos y enseres
de los mismos. Solo faltaría que se filmen las películas para intentar
justificar los graves atropellos que se viene cometiendo contra estos hermanos
nuestros que luchan y mueren por el
soberano derecho a la tierra propia.
Comentarios
Publicar un comentario