TIEMPOS DE MANIPULACIÓN
En realidad no hay un tiempo especial de
manipulación porque los medios y los políticos nos manipulan permanentemente.
Pero en los tiempos electorales eso se acentúa, como lo advierte muy claramente
el Mons. Gabriel Escobar Vicario del Alto Paraguay, en su homilía en Caacupé el
4 de junio pasado, donde afirmó que “los políticos deben cumplir lo que
prometen ya que los únicos que sufren son los propios compatriotas” “Hay que estar atentos – dijo en otra parte -
porque ya van a empezar a brillar los espejitos” (Diario Última Hora, 5 de
junio de 2017)
Cumplir lo prometido. Puede ser mucho
pedir dentro de nuestra política criolla. En algunos de los países que tienen
prevista en su Constitución Nacional, la “Revocatoria de Mandato” se les exige a
los candidatos asentar en actas de escribanía sus promesas electorales cuyo
incumplimiento dentro de determinado tiempo, puede ser motivo para que se les inicie el proceso de
revocatoria de mandato. Aquí estamos
lejos de eso. En general, en nuestros medios de prensa no se
disimulan mucho las posiciones políticas electorales. Así lo dejan expuestos los titulares de la
prensa escrita y por los invitados, también podemos catalogar los programas televisivos. Pero nadie puede estar seguro de estar
informado y de que puede sacar sus propias conclusiones, porque podríamos estar
manipulados sin que nos diésemos cuenta de ello. “En particular por la
publicidad subliminal. Mediante el recurso a mecanismos sicológicos y gracias a técnicas
bien rodadas, los Mad Men de la
publicidad consiguen que compremos, ya sea un producto, un servicio o una idea. De ese modo nos convertimos en
personas teledirigidas. Y felices” (Ignacio Ramonet, periodista y escritor
franco- español, en su comentario sobre
la obra del visionario filósofo y escritor inglés que migró a los EE.UU. Aldous Huxley, UN MUNDO FELIZ, que tituló: “Comprender cómo nos manipulan” publicado en
Correo Semanal del Diario Última Hora, del día sábado 6 de agosto de 2016) Interesante artículo sobre una obra
publicada en 1932, que pertenece al género “de la distopía, la fábula de
anticipación, la utopía científica técnica, la ciencia ficción social” que se
editó antes de internet y de la televisión, pero que, según Ignacio
Ramonet, si alguien “se vuelve a
sumergir en las páginas de esta novela se quedará estupefacto por su
sorprendente actualidad” Podemos decir que este artículo ya es de por sí
sorprendente y motiva la relectura y la
reflexión. Siguiendo con el texto del
mencionado artículo, en la década de 1.950 fueron denunciadas dos agencias de
publicidad por intentar “manipular el inconsciente de los consumidores. Sobre
todo mediante el uso de la publicidad subliminal en los medios de comunicación
de masas” “Actualmente – sigue diciendo – la publicidad subliminal ha
avanzado y existen técnicas hasta más perversas para manipular la mente del ser
humano. Por ejemplo mediante los colores, que modifican nuestras percepciones e
influyen en nuestras decisiones. Los especialistas en marketing lo saben y
utilizan sus efectos para orientar nuestras compras” Sobre los experimentos
hablaremos en otro comentario. Por de pronto, nos preguntamos ¿Hasta qué
punto estamos siendo manipulados sin advertirlo? Es difícil saberlo, porque los profesionales
del marketing político que son contratados a altos costos, no nos revelarán su
técnica. Por de pronto como lo afirma
Mons. Gabriel Escobar, deberemos estar atentos, para que nuestros políticos no
nos sigan vendiendo espejitos. Confiamos en que la sabiduría del pueblo y la
conciencia ciudadana nos permitirán descubrir las mentiras de los políticos
deshonestos y corruptos, que siguen retrasando miserablemente a nuestro país.
Comentarios
Publicar un comentario