Día del periodista:
OTRA MUERTE, OTRO SILENCIO.
Mañana se celebrará una vez más el Día del Periodista paraguayo y como
siempre la celebración lo harán los propios periodistas, en realidad unos pocos
periodistas. Como parte del programa organizarán algunos paneles de los que
participarán solamente ellos. Una vez más irán juntos hasta el Monumento del
compañero muerto para hablar de la injusticia e impunidad de su muerte.
Anteayer asesinaron a otro comunicador, a quién también le van a recordar. Mencionarán también a otros comunicadores que
fueron asesinados. Pero el acto será entre ellos. En la sociedad toda sólo
habrá silencio e indiferencia. Es como
si nada importara toda la profundidad de la problemática comunicacional. Como
si de la libertad de prensa y opinión no dependiera en medida superlativa la
vigencia de los derechos fundamentales que protegen la dignidad de las personas.
¿A qué se debería este silencio? ¿Al temor de promocionar la fortaleza
de la prensa libre? ¿A la seguridad que se tiene de poder manejarla y
manipularla en aras de los intereses mezquinos?
La sociedad tiene que interesarse por la calidad de la información que
recibe y defender a todo precio la libertad de prensa.
El derecho a la comunicación debe ser consagrada. No debemos permitir
que los propietarios humillen a sus periodistas bajo la coacción laboral. La
prensa libre y digna debe ser propiciada y protegida.
Que esta sea la ocasión de rendir un homenaje sincero a tantos
periodistas, hombres y mujeres, que hacen de la comunicación una vocación de
vida y compromiso con la sociedad y con el país.
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