Ir al contenido principal

EL DIOS ZEUS SIGUE VIVO

EL DIOS ZEUS SIGUE VIVO.
¿Hemos avanzado los seres humanos con respecto a la ciencia y los misterios del universo? En algún sentido, sí. En otros sentidos, no tanto. Sí, hemos avanzado y la ciencia nos ayudó para ello, en la identificación y revelación de varios hechos que para nuestros antepasados eran misterios tan sobrecogedores a tal punto que terminaban por adjudicarles poderes divinos. Por ejemplo, dentro de la mitología griega, Zeus, era el soberano del cielo que cuando se enojaba, arrojaba relámpagos y truenos. En Roma, el equivalente del dios Zeus, era Júpiter; en la India, Indra; en la China, Lei gong y en algunas otras mitologías, los mismos rayos y truenos, eran personificados como seres vivos. A estos dioses se procuraba aplacar sus iras con todo tipo de ofrendas. Cuando la ciencia nos ayudó a entender cómo se producen los truenos y relámpagos, estos dejaron de ser dioses, pero aparecen otros misterios de hechos posibles o remotos, infundados o no, que si bien ya no se les proclaman dioses, siguen sobrecogiéndonos por las amenazas que puedan representar para toda la humanidad. Es decir, en este sentido de seguir proyectando nuestros miedos, frente a lo inexplicable, no hemos avanzado tanto. Aún cuando la ciencia pueda descartar la ocurrencia de ciertos hechos que anuncian los agoreros, por ignorancia o por intuición, el miedo sobrevive. El famoso miedo del fin del mundo, reaparece cada tanto. En estos días en la página Web (http://noticiasalinstantes.com/) basándose en un supuesto informe de la NASA, anuncia que el 21 de diciembre del 2014, se desatará una tormenta solar, que será la más grande en 50 años que dejará al planeta tierra en la oscuridad durante 72 horas, tres días sin sol. En el imaginario popular, ya se asegura, que esto se debería a que un planeta gigante se acerca a la tierra, y que en esos tres días la oscuridad será tan especial que solamente alumbrarán las llamas de velas bendecidas. Por suerte la ciencia viene a nuestro auxilio. Nos aclara que esto es una mentira recurrente. “Este anuncio no es científico, es una creencia infundada, es un mito que ello ocurra. No existe ningún planeta gigante que se esté acercando a la tierra. Para que el sol se apague - nos dicen - se deberá acabar sus reservas de hidrógeno, que podría darse dentro de unos 5 mil millones de años y recién entonces podría darse el fin del planeta tierra. La gente está más propensa a aceptar las creencias que la realidad científica, es por ello que la teoría de los tres días de oscuridad, podrá volver reciclado con otro mito apocalíptico, ya que la supervivencia de esta creencia, se basa en la ignorancia y en la superstición” (http://blogs.laprensagrafica.com/…/los-tres-dias-de-oscuri…/)
En conclusión, no importará cuánto avance la ciencia, sobrevivirán los misterios por develar, y por nuestras limitaciones humanas, seguiremos proyectando nuestros miedos hacia el futuro, seguiremos proyectando la necesidad de aferrarnos a un ser superior.
¿Será que la ignorancia y la superstición nunca serán superadas? Si eso es así, el Dios Zeus, de alguna manera, seguirá vivo entre nosotros.

Comentarios

Entradas populares de este blog

MORIR EN LA PAVADA

MORIR EN LA PAVADA. Este cuento utilizó el sacerdote en su homilía de este domingo. No citó ninguna fuente pero me pareció interesante como tema de reflexión y heme aquí intentando recordar los detalles del mismo. Un hombre que vivía cerca de una montaña había encontrado en la parte más alta de la misma un huevo. Este era más grande que el de la gallina, y más pequeño que el del avestruz. No podía serlo porque cómo harían la gallina y el avestruz para subirse hasta la cima, pensó. Lo trajo a su casa y como estaba empollando una pava lo puso en su nido. Nacieron las pavitas y entre ellas había una  que parecía más grande y con algunos rasgos y pelos diferentes. Mamá pava cuidaba de todas ellas. Las pavitas crecían comiendo lombrices y frutitas silvestres. Cuando ya estaban crecidos los pavos, el granjero se dio cuenta que aquel huevo que trajo de la montaña era el de un cóndor. Sin embargo este pavo- cóndor seguía comportándose como los otros pavos. Un día que éste vio pasar un...

LECCIONES COMPLEMENTARIAS.

LECCIONES COMPLEMENTARIAS Está en auge la evaluación de los resultados de las elecciones municipales del 15 de noviembre pasado tanto por parte de los triunfadores como de los derrotados. Hay coincidencia en el reconocimiento de que el electorado castigó a los intendentes corruptos que intentaron seguir en el cargo a pesar de la defraudación administrativa y la traición a las promesas electorales que han cometido. Se aprendió la lección de que la maquinita de resultados que tenía como insumo las estructuras partidarias y las prebendas del dinero, ha dejado de tener efectos decisivos. Que por fin la ciudadanía pudo conseguir asociar que la baja calidad de vida, que los malos servicios de transporte público y el deficiente servicio de recolección de basura domiciliaria, que los baches y zanjones de las calles inundadas, que las escuelas que se caen en pedazos sin pupitres ni servicios sanitarios, que las calles oscuras y la inseguridad que campea en los barrios, son hechos que ...

REPATRIANDO PRÓCERES

REPATRIANDO PRÓCERES. La miseria de un pueblo se patentiza mucho más cuando exilia o expulsa a sus miembros o a sus conciudadanos. Tantos sean estos los exiliados económicos o, lo que es peor, sus exiliados políticos. Es grave cuando por razones económicas, nuestros compatriotas marchan allende la frontera en busca de las oportunidades que les niega su país.  En este sentido nuestra historia ha sido muy dura. Recordemos algunos casos emblemáticos como el de Augusto Roa Bastos, que cuando fue expulsado por la dictadura, el periodista y escritor Alcibiades González del Valle había afirmado en dramática ironía: “Hemos perdido un ciudadano pero hemos ganado un escritor” en el sentido de que en las condiciones tan primarias que se vive en nuestro país es muy difícil que alguien sea escritor, un creador. O el caso de aquel artista y compositor compatriota, que aprovechó una noche para cruzar el Río Paraná, y llevarse un tarro de tierra, de tierra roja paraguaya, su tierra que ya n...